Durante la primera década de los 2000, Allisson Lozz se convirtió en una de las actrices más reconocidas de la televisión mexicana.
Su carisma y talento la llevaron a protagonizar exitosas telenovelas como Al diablo con los guapos y En nombre del amor, consolidándose como una figura querida por el público.
Sin embargo, en un giro inesperado, la actriz decidió alejarse del mundo del espectáculo en el punto más alto de su carrera, optando por un camino completamente diferente: el de los negocios.
Un adiós definitivo a la actuación
Allisson Lozz sorprendió a sus seguidores cuando en 2009 anunció su retiro definitivo de la actuación. Tenía apenas 17 años, pero ya era una de las estrellas juveniles más prometedoras de Televisa. ¿Qué la motivó a dejar una carrera tan exitosa? Según ha compartido en entrevistas y redes sociales, su decisión estuvo basada en una profunda insatisfacción con el ambiente de la industria del entretenimiento. Describió ese entorno como tóxico, lleno de presiones y carente de autenticidad. Su deseo era llevar una vida más tranquila, enfocada en su salud mental, su espiritualidad y su familia.
Tras alejarse de los reflectores, Allisson también cambió su nombre artístico por el de Allisson Gutiérrez, adoptando el apellido de su esposo. Se convirtió al cristianismo y se mudó a Estados Unidos, donde comenzó una nueva etapa de su vida lejos de los medios de comunicación.
El nacimiento de una empresaria
Lo que muchos no esperaban era que, años después, Allisson encontraría un nuevo éxito, esta vez como empresaria en el mundo de los cosméticos. Comenzó trabajando en Mary Kay, una reconocida marca de venta directa, donde rápidamente destacó por su habilidad para las ventas y el liderazgo. Más tarde, se unió a Farmasi, otra empresa internacional de cosméticos y productos de cuidado personal, donde su carrera como emprendedora dio un salto exponencial.
En 2023, Allisson fue reconocida por Farmasi como parte del “Club de Millonarios”, un selecto grupo de vendedores con resultados extraordinarios. La ex actriz ha compartido abiertamente que, actualmente, gana mucho más dinero del que alguna vez obtuvo trabajando en Televisa, y lo mejor: lo hace desde casa, sin horarios fijos y con total control de su tiempo.
Inspiración para otros
Allisson no solo ha transformado su vida personal y profesional, sino que también se ha convertido en una fuente de inspiración para otras mujeres que buscan independencia económica y libertad de horarios. A través de sus redes sociales, comparte su experiencia como empresaria, ofrece consejos de belleza y motivación, y muestra cómo ha logrado construir una vida plena, lejos de las cámaras, pero muy cerca de su propósito.
Lozz también ha enfatizado la importancia de poner la salud mental y emocional en primer lugar. En lugar de buscar la fama o la aprobación externa, ha optado por un estilo de vida basado en la autenticidad, la fe y la autosuficiencia. Su historia demuestra que es posible reinventarse, dejar atrás una vida aparentemente exitosa, y encontrar un camino aún más satisfactorio y enriquecedor.
Una nueva vida en Estados Unidos
Hoy, Allisson vive en Colorado junto a su esposo e hijas, disfrutando de una vida tranquila en familia. Ha dejado claro que no tiene intención de regresar a la actuación, y se siente completamente realizada en su nueva faceta como empresaria. Para ella, el éxito ya no se mide por la fama o el reconocimiento público, sino por la paz interior, el tiempo con sus seres queridos y la posibilidad de ayudar a otros a alcanzar sus metas.
